Este año se cumple el bicentenario del nacimiento de la Reina Victoria de Inglaterra (1819-1901). No solo fue una longeva monarca sino que también durante su reinado se alcanzó una etapa de esplendor en el país, acompañada siempre de su esposo y su numerosa familia.
Una biografía se puede leer fácilmente en muchos sitios web. Aquí presentaremos cinco cosas que posiblemente desconocías de su majestad:
Fue prácticamente amor a primera vista y se casaron en 1840. Ella relata en su diario los últimos momentos que pasó con su esposo en su lecho de muerte. Aún con la fuerza suficiente pudo corresponder al beso pero su presencia no duró mucho más. “Respiró dos o tres veces, estrechándome la mano, y -¡oh!, me enferma escribirlo- todo, todo acabó. Su espíritu celestial abandonó este mundo, libre de las penas y tribulaciones de esta vida. Por fin, llegó el último beso: “Me levanté, le besé la frente, estallé en un amargo y agonizante lamento: “¡Oh! ¡Cariño mío!”, y caí de rodillas, desesperada e incapaz de murmurar una palabra o derramar ni una sola lágrima”. Este relato nos conmueve por la cercanía y el lado más humano de la reina que nos muestra.
Fue gracias a su vestido de novia, un blanco impoluto, que se ha conservado la tradición del uso de este color para los vestidos de novia. Antes se utilizaban de todos los colores y sabores, incluso el negro. Tenía un gusto por la moda y la exposición que se realizó con sus vestidos son prueba de ello. Ahí se muestra el vestido más impactante que usó en el Stuart Ball (1851). La falda está bordada con motivos exóticos típicos de la India en color coral que resalta con detalles dorados.
Imponiendo tendencias
No solo era innovadora en la moda, también en la joyería. Se destaca sobre todo en el uso que le dio a la corona, no siempre puesta sobre su cabeza sino en su moño castaño. Esto se conserva en el Retrato de la reina Victoria por Franz Xaver Winterhalter. La diadema fue diseñada por el mismísimo Príncipe Alberto, decorada con diamantes y zafiros. Aunque no fue lo único que diseñó para ella, también su anillo de compromiso y muchos broches, tiaras y anillos.
Una de las mejores compañías que tuvo durante su vida, duramente juzgado por los elitistas ojos de la corte y de su propia familia, fue Karim Abdul. Un sirviente del norte de la India que entabló una relación cercana con la reina. Le enseñó palabras en hindustaní y gracias a él desarrolló un amor por la cultura india. Recibió muchos privilegios y condecoraciones, que soltó muchas envidias, incluso dentro de los mismos hijos de la reina. A pesar de que se difundieron rumores de que había una relación amorosa, nada apunta a que esto fuera cierto. Se basaba más bien en una relación de madre hijo; las cartas que le enviaba a Abdul las firmaba como “tu madre que te quiere” y “tu amiga más íntima”. Todo esto desapareció según The Telegraph, el príncipe Edward exigió que toda la correspondencia se quemara y que abandonara el país inmediatamente. Una periodista destapó la historia para este mismo diario. Puede leerse aquí.
La Reina Victoria tuvo nueve hijos. Mucho de los cuales sus herederos son hijos de los actuales monarcas europeos. Tal es el caso de los reyes Felipe VI, Harald V de Noruega, Carlos XVI Gustavo de Suecia, Margarita II de Dinamarca y Felipe de Bélgica (hasta la esposa del zar Nicolás II, Alejandra Romanov, que murió en 1918). Incluso muchas mujeres de la realeza se les sigue llamando con este nombre.
Paola Bernal H.
|
Me llamo Borja Guinea Errasti, nací el 5 de enero del 2000 y desde muy pequeño he mostrado interés por la historia, muy especialmente en sus conflictos bélicos. A tanto ha llegado este interés por la historia, que actualmente estoy cursando la carrera de Historia junto con la de Periodismo en la Universidad de Navarra. Mi comienzo en la historia bélica, y en la historia en sí, fue gracias a los videojuegos. Antes de conocer a las grandes figuras de la historia me entretenía con el "Imperium III: Las grandes batallas de Roma", un juego de estrategia basado en las conquistas de Roma y sus máximos desafíos, como la conquista de Numancia o Anibal en Italia. A partir de este juego, me empecé a interesar por los romanos y mis padres me compraron un libro sobre su modo de vida. Tras los romanos, otro videojuego, en esta ocasión sobre la 2ª Guerra Mundial, "Panzers II" acompañando a los italianos en Egipto o ayudando a los partisanos yugoslavos a li
Comentarios
Publicar un comentario