Ir al contenido principal

Indescriptible



Mi nombre es Mayte Sánchez Marco. Estudio segundo del doble grado de Historia y Periodismo en la Universidad de Navarra. Nací en un pueblo de la provincia de Alicante, Novelda. Es allí, en Novelda, donde sitúo el primero momento en el que soy consciente de que me gusta la Historia. Fue con el colegio, en una visita a una exposición arqueológica de época musulmana en la casa de la cultura. 




Tuve dos profesores de Ciencias Sociales en el instituto.El primero, Javier, me enseñó a amar el Arte y la Geografía. Fueron tres años en los que la Historia pasó de ser un hobby a ser un sueño. Él fue el encargado de esa visita a la casa de la cultura. Mi segundo profesor fue Isidro. Él me enseñó a amar la Historia en toda la extensión de la palabra. Con Isidro podía hablar de cualquier época de la Historia sin problema: antigua, moderna, contemporánea... Sin embargo, todavía había una persona que me influiría más que ellos dos: Antonio, mi profesor de Arte. 

Descubrir el Arte fue la gran confirmación que necesitaba para estar segura de que quería estudiar Historia. Nunca pensé que llegaría a llorar durante una clase de Arte y mucho menos mientras estudiábamos el cuadro de Saturno devorando a su hijo de Francisco de Goya. 

Recuerdo la primera definición de Historia que me dieron: "Es el estudio de las culturas y civilizaciones pasadas" ¿Se trataba solo de eso? ¿Cómo era posible que una pintura transmitiera tanto? Fue en esa clase cuando aprendí el significado real de la palabra Historia. No trata solo de conocer civilizaciones pasadas y sus culturas. Se basa en entenderlas, sentirlas y darles un significado; ser capaz de transportarte a esa época. 

Durante toda mi vida, Londres había sido mi ciudad favorita hasta que fui a Roma en 2017. Ese viaje provocó que no solo se convirtiera en mi ciudad favorita sino que ninguna la podría superar. Durante siete días estuve siempre erizada; emocionadísima. Pisaba calzadas y visitaba monumentos de dos mil años de antigüedad. El panteón, los foros imperiales o republicanos, el monte Palatino, el campo de Marte... Y de la misma forma que caí rendida ante los romanos , lo hice ante el Renacimiento. La Basílica de San Pedro, la capilla Sixtina (la "joya de la corona"), las Estancias Vaticanas de Rafael...

Mi padre ha sido otro de los grandes influyentes en mi gran amor por la Historia. Desde que aprendí a leer, mis padres han ayudado mucho a que esta afición por la lectura fuera en aumento. He leído desde Gerónimo Stilton hasta Santiago Posteguillo. Esto me permitió tener una relación muy estrecha con mi padre y de complicidad. Ambos podíamos hablar de temas que nos apasionaban y podíamos aprender el uno del otro.


Encontrar la vocación de uno mismo, la cosa que más te gusta, es muy difícil. Pero, si a eso le sumamos el tener la posibilidad de dedicar toda tu vida a ella, es casi imposible. Saber que la Historia y el Periodismo llenan mi vida y son dos hobbies que estoy convirtiendo en profesión, definitivamente es una experiencia indescriptible.




Mayte Sánchez Marco 

Comentarios

Entradas populares de este blog

De un videojuego a una carrera universitaria

     Me llamo Borja Guinea Errasti, nací el 5 de enero del 2000 y desde muy pequeño he mostrado interés por la historia, muy especialmente en sus conflictos bélicos. A tanto ha llegado este interés por la historia, que actualmente estoy cursando la carrera de Historia junto con la de Periodismo en la Universidad de Navarra.      Mi comienzo en la historia bélica, y en la historia en sí, fue gracias a los videojuegos. Antes de conocer a las grandes figuras de la historia me entretenía con el "Imperium III: Las grandes batallas de Roma", un juego de estrategia basado en las conquistas de Roma y sus máximos desafíos, como la conquista de Numancia o Anibal en Italia.      A partir de este juego, me empecé a interesar por los romanos y mis padres me compraron un libro sobre su modo de vida. Tras los romanos, otro videojuego, en esta ocasión sobre la 2ª Guerra Mundial, "Panzers II" acompañando a los italianos en Egipto o ayudando a los partisanos yugoslavos a li

Por qué

Mi nombre es Ane Urrizburu Jáuregui. Nací en Pamplona en el 2000. Ahora estudio segundo curso de Historia con Periodismo y Diploma de Arqueología en la Universidad de Navarra.  Si no me encontráis estudiando, seguramente esté entre mis plumas y tintas haciendo caligrafía, pasando las páginas de un buen libro cerca del río, ajustando el objetivo de la cámara o tomando un café en la plaza del Ayuntamiento con mis amigos. Si queréis saber más sobre mi, podéis seguirme en mi Instagram .  Excavando en el yacimiento romano de  Los Bañales , 2019. Tratando de escribir este post , he charlado con mis colegas de Historia y les he preguntado por qué les empezó a interesar todo esto. Cada uno tenía sus motivos: películas, videojuegos, un museo, un documental… Parecían saberlo con mucha exactitud, como un discurso. Para mí eso es más un detonante, una materialización de un sentimiento que creo más profundo, casi innato. ¿Qué sintieron al verlas? ¿Por qué les atrajeron aquellas cos

Mis mejores deseos

Mis mejores deseos  By: Julieth Castillo  Este será mi ultimo post, aunque fue una experiencia muy bonita, tengo que admitir que fue algo cansador, y algo difícil de manejar, al yo no ser una experta en tecnología simplemente fue algo un poquito más complejo de lo que yo tenia en mente, no significa eso que no disfrutara todo lo que pase, cada momento fue muy divertido.  Empece escribiendo mi primera experiencia con la historia, aunque yo personalmente la tengo clara, y por lo tanto fue lo que relate en “Un moviendo desde siempre” , la verdad fue muy bueno contarlo, es algo que aunque no todos entienden cada vez que lo imagino me emociono, la historia tiene eso de lindo, que si la disfrutas se te ilumina la cara y creo que eso me paso con cada uno de mis post a los cuales considero que uno les termina teniendo cierto cariño, pues son partes de tu carrera, de tu investigación y más importante de tu memoria.  Después escribo sobre un caso que me impactara, aunq